Regalos Irrevocables

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Así, todo Israel será salvo, tal como está escrito:

“El Libertador vendrá de Sion; apartará la impiedad de Jacob. Y este es Mi pacto con ellos, cuando yo quite sus pecados.”  Rom. 11:26

Entre este versículo y el anterior que habla del día en que los gentiles alcancen su plenitud (Rom. 11:25), la Novia de Cristo – La Iglesia tendrá que ser removida,   pues  para que el inicuo – el anticristo se pueda manifestar, El Espíritu Santo tendrá que ser removido :

 “aquél que por ahora lo detiene ( al anticristo), lo hará hasta que él mismo sea quitado de en medio”. 2 Tess. 2:6-7.

Una vez que el Rapto ocurra,  todo lo que necesita suceder antes de que El Libertador rescate a su pueblo de Israel, sucederá. Puesto que esas cosas que habrán de suceder solo afectan a los no creyentes,  y puesto que no creen, no tiene caso que las mencione en este espacio.

Lo único que cabe mencionar es que el Rapto de la Iglesia que acabamos de estudiar en las semanas pasadas no es lo mismo que la Segunda Venida de Jesucristo,  pues según todas las profecía referentes a su regreso, Jesucristo, el Mesías vendrá a ponerle fin a dicha Gran Tribulación,  y a poner a todos sus enemigos por estrados de sus pies,  a quienes removerá con el aliento de su boca, igual que a dicha bestia:

Entonces será revelado ese impío, a quien el Señor matará con el espíritu de Su boca, y destruirá con el resplandor de Su venida2 Tess. 2:8

No se trata de si la Iglesia se siente lista o no,  si se quiere ir o no,  es por su protección que tendrá que irse, sin importar lo que los escépticos opinen.    Recientemente encontré un video en YouTube de cierto ministro que lanzó condenación sobre aquellos cristianos que esperamos con gran anticipación ver a nuestro Señor en las Nubes,  comparándonos con “Las Ratas”  que brincaron del Titanic dejando a las clases pobres atrapadas.

Yo no condenaría al Hijo de Dios, cuando la escritura dice que “No hay mas condenación para aquel que está en Cristo” (Rom. 8:1);  mucho menos los llamaría RATAS, pues Jesús le dijo a Pedro que no llamara inmundo a quien El ya hizo limpio (Hechos 10:15);   simplemente, esta comparación no es válida, debido a que Dios nos dio libre albedrío a todos los humanos para decidir lo que creemos y nadie puede ser forzado a creer en Jesús como Salvador, asi como a no creer.

Esta es la única manera en que podemos saltar a Su barca  para ser salvos y nadie podrá impedírnoslo, ni principados, ni potestades,  ni la muerte misma (Rom. 8:38-39);  por tanto,  la gente que no salte, no será porque la tienen atrapada o engañada,  sino simplemente porque se rehusará a creer y esto sucederá  porque  no recibieron el amor de la Verdad para ser salvos (2 Tes. 2:10-13; Salmo 52:3; Rom. 1:25);

Verás, cuando la novia de Cristo sea levantada, todos aquellos que hayan escuchado al Espíritu Santo y se hayan vuelto a Jesucristo, sean judíos o gentiles, serán parte de ella; sin embargo, siendo la ofensa al Espíritu Santo la única que Dios no perdona, aquellos que lo rechazaron ya no podrán ser salvos por la fe en Jesucristo, solo por martirio al no haber adorado a la bestia, o a su imagen y no haber recibido su marca (Rev. 20:4) .

En cuanto al evangelio, son enemigos (los israelitas) por causa de ustedes, pero en cuanto a la elección de Dios, son amados por causa de los padres.  Porque los dones y el llamamiento de Dios son IRREVOCABLES.  Rom. 11:28-29

¿Qué quiere decir Pablo?, que si los gentiles no hubieran aceptado la invitación de Dios, el judío no habría sido su único enemigo, todo el mundo lo sería, y quizá este mundo ya habría sido aniquilado, pues no habría a nadie más a quien esperar. Pero porque a Dios le plació amarlos por aquel convenio con Abraham, Dios les sigue esperando, porque él no es un Dios que dé y quita, como lo creía Job, y como aun lo escuchamos en los funerales.

Por ello no le quitó su voz a Elvis Presley o a Whitney Houston cuando ellos decidieron usar sus regalos para el mismo mundo que les cortó la vida, más tenemos la esperanza de que los volveremos a ver porque aquí la palabra nos demuestra que  la Salvación NO SE PIERDE, porque la salvación es por Gracia, es un don de Dios, la palabra nos lo confirma:

LOS DONES(LOS REGALOS) Y EL LLAMAMIENTO DE DIOS SON IRREVOCABLES.

… porque Dios los ha escogido desde el principio para salvación mediante la santificación  por el Espíritu y la fe en la verdad.  Fue para esto que El los llamó mediante nuestro evangelio, para que alcancen  la gloria de nuestro Señor Jesucristo. 2 Tes. 2:13-14

Shalom