Habiendo entendido lo que es la fe bíblica, sera fácil reconocer lo que es “otro evangelio”. El Apóstol Pablo mismo lo reconoció en lo que antes defendía con fervor – La Ley de Moisés, en la cual el judío tiene su identidad, como lo descubrió el mismo Pablo cuando le fue revelada la verdad que él perseguía y buscaba salvajemente destruir; esta verdad imprimió en su corazón un Mensaje de Amor para las naciones que es sobre todo debate religioso o doctrina humana (Ver. Gal. 1:11-14); el versículo siguiente encapsula tal verdad:
El eterno sueño de Amor(eudokeo1) de Dios me separó (kaleo2) desde el vientre de mi madre3, Su Gracia se volvió mi identidad3. Este es el corazón del Evangelio que predico; que se inició con una revelación de mi filiación4; liberándome para anunciar la misma filiación de las masas de gente no judía (Gal. 1:15-16 “El Espejo de la Palabra”)
1 La palabra “eudokeo” significa “su hermosa intención o su buen placer, su decision completamente tomada intencional y voluntariamente.
2 La palabra “kaleo” significa “nombrar” o “llamar por su nombre”, llamar en voz alta.
3 El vientre de mi madre – mi linaje natural e identidad como hijo de Benjamin
4 La palabra “filiación”, que en el inglés se traduce como “sonship”, no refleja en español con énfasis suficiente lo que la Gracia ha hecho en todos los hombres que vivíamos como huérfanos, como “ovejas sin pastor”, y puesto que la palabra “hijidad” no existe, la nombraré “identidad de hijos” para los propósitos de este estudio.
Si amado(a), La Ley convirtió al hombre en “esclavo”, mas La Gracia nos convirtió en Hijos, vinculados a nuestro Padre a través de Jesucristo. Esto es lo que Pablo quizo decir con las palabras traducidas comúnmente como “Cristo en mi”, o “Cristo en los gentiles” (traducido erróneamente como: “entre los gentiles”); éste es el significado de “Cristo en ti, esperanza en gloria”, como a continuación te traduzco de la versión El Mensaje,
Este misterio se ha mantenido en la oscuridad durante mucho tiempo, pero ahora está a la intemperie. Dios quería que todos, no sólo los judíos, supiéramos este rico y glorioso secreto por dentro y por fuera, sin importar su origen, sin importar su estado religioso. El misterio, en pocas palabras es simplemente éste: Cristo está en ustedes, así que por lo tanto ustedes pueden esperar ser participes de la Gloria de Dios con anticipación. Es así de simple. Esa es la esencia de nuestro mensaje. Nosotros predicamos a Cristo, advirtiendo a la gente a no añadir al mensaje. Enseñamos en un espíritu de profundo sentido común para que podamos llevar a cada persona a la madurez. Ser maduro es ser básico. ¡Cristo! Ni mas ni menos. Col. 1:26-27 The Message
¿Te das cuenta por qué se pervierte el Evangelio al re-introducir la Ley? El mensaje deja de ser puro, deja de ser básico, deja de ser Cristo sin añadiduras; y tal añadidura, la añadidura de la Ley, la cual no es de fe, nos robará de la Promesa de Vida eterna, la cual no puede recibirse por la Ley,
Porque si los que son de la Ley son herederos, vana resulta la fe y anulada la promesa. Rom. 4:14
Nuevamente te traduzco un comentario de El Espejo de la Palabra para que podamos reflejarnos en el mismo:
“La humanidad olvido que tipo de criatura era por diseño; el hombre es el portador de la imagen y semejanza de su hacedor; eso es exactamente lo que Jesús vino a revelar y a redimir. Ahora podemos contemplarle sin el velo en nuestros rostros como en un espejo y ser inmediatamente transformado (en nuestro entendimiento) a su semejanza. De la gloria (opinión) de la carne [tu propia habilidad o fuerza, énfasis mio] a la gloria (opinión) de Dios. El legalismo de la religión mantuvo el velo en su lugar; el proclamar la verdad liberadora de la Buena Noticia, remueve el velo.
El patito feo no necesitó cirugía, ni lecciones de como imitar la vida de un cisne, solo necesitó saber la verdad acerca de quien era realmente para ser libre.” El Espejo de la Palabra –
Quizá tu ya has creido el Evangelio de Gracia, mas la adversidad quiera amenazar tu reposo y la voz de tus circunstancias quiere robarte la fe, convirtiéndose en “los amigos de Job” : “algo hiciste para caerte en la maldición”, “eres una langosta frente a esos gigantes”; (ver. Num. 13:33); “si de verdad eres Hijo de Dios, haz esto o el otro.”, voz que habla mas fuerte conforme escuchamos sus acusaciones de todo lo que hicimos mal, de todo lo que no estamos haciendo bien o de todo lo que no está saliendo bien.
Estos dardos de fuego del enemigo provienen de la Ley, buscando pervertir la imagen de Dios y por consiguiente tu identidad. Por lo mismo, al igual que con Jesús en el desierto, la tentación mas grande siempre será la alternativa de “hacer que las piedras se conviertan en pan”, esto es, a recurrir a la piedra de la Ley en busca de consuelo, de identidad o de fuerza. Mas el pan que sostuvo a Jesus en el desierto fue la Palabra que El creyó de su Padre: “Tú eres mi Hijo amado, en quien tengo mi complacencia” . Esa misma palabra te sostendrá a ti cuando por el Espíritu Santo te sea revelada y entonces no podrás evitar la fe. Oro que así suceda.
Por consiguiente, hoy venimos al Padre no tanto a persuadirlo de que nos haga un favor, como un amo bueno, o a que nos de cosas que Él sabe que necesitamos, sino a que Él nos persuada a creer nuestra “identidad de hijos” (ver Mat. 23:9), a que por su Palabra y su Espíritu nos revele lo que El dice que somos – Jesus en nosotros y nosotros en Jesús, hechos a su imagen, unidos y reconciliados al Padre para siempre, sentados con Él a Su diestra, grandemente favorecidos por encima de cualquier esclavo, sin importar lo que las circunstancias quieran que creamos. Sentados en esta verdad, será como “todas esas cosas” nos serán añadidas y nuestras circunstancias silenciadas.
Como Pablo lo dijo a los griegos
Porque en El vivimos, nos movemos y existimos, así como algunos de los poetas de ustedes han dicho: ‘Porque también nosotros somos linaje Suyo. Hechos 17:28
Shalom
